colonoscopia

La colonoscopia y su dieta de preparación

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U.S. Navy photo by Mass Communication Specialist 2nd Class Chad A. Bascom [Public domain], via Wikimedia Commons

Este artículo sobre la colonoscopia, en qué consiste, para qué se realiza, la dieta de preparación previa a su realización, con los alimentos recomendados y aquellos que se deben evitar, es cortesía de Juan Álvarez Cabrerizo, coordinador Editorial de cuadro-medico.net.

¿Cuánto tarda en hacerse una colonoscopia?

La colonoscopia es una prueba diagnóstica que examina el intestino grueso en busca de posibles afecciones. El alcance de una colonoscopia va desde el ano, a través del intestino grueso, pudiendo llegar hasta el íleon, la parte final del intestinodelgado.

Se trata de un examen de lo más habitual para la detección de afecciones intestinales y, en el caso de los adultos a partir de los 50 años, se realiza de manera habitual para identificar un posible cáncer intestinal. No obstante, se trata de una prueba prescrita para todo tipo de dolencias intestinales.

Procedimiento de la colonoscopia

Durante la colonoscopia se introduce un tubo dotado con una cámara, llamado colonoscopio, por el ano y se insufla aire para el inflado y correcta exploración del recto. En la actualidad muchos colonoscopios disponen de una pequeña bombona que emite dióxido de carbono en lugar de aire, puesto que éste resulta mucho más higiénico que el aire ambiente.

Antes del examen, un enfermero nos pondrá una vía por la que se introducirán ciertos medicamentos anestésicos. A pesar de no estar completamente sedado, el paciente apenas podrá sentir nada durante la prueba, pero se conserva su estado de consciencia en caso de que fuera necesaria una interacción entre el gastroenterólogo y el paciente. Una vez anestesiado, el paciente reposa sobre su costado izquierdo y es sometido a un tacto rectal por parte del médico especialista.

Dependiendo del desarrollo de la colonoscopia, es posible que se requiera una intervención, como la extracción de una biopsia de una masa o la extirpación de un pólipo. El colonoscopio dispone de una cavidad a través de la cual se pueden introducir distintas herramientas para la realización de estas operaciones, por lo que se puede realizar la exploración y la intervención en un mismo proceso.

Una vez finalizada la colonoscopia, se retira el tubo, se limpia la zona anal y se procede a la recuperación de la sedación durante unas horas.

El proceso de la colonoscopia no es especialmente prolongado, pues conlleva normalmente unos 20 minutos. No obstante, en caso de ser necesaria una extirpación de pólipos o la extracción de una biopsia de un cuerpo extraño, ésta podría alargarse hasta los 45 minutos, aunque no debería alargarse más.

Sin embargo, es posible que lo que más se alargue sea la lista de espera para realizarse esta prueba. En la sanidad pública, es posible que un examen de este tipo se tarde unas semanas en llevar a cabo. Sin embargo, si disfrutas de un seguro privado de cuadro médico, esta espera se reduce al tiempo de preparación, es decir, 3 días.

¿Para qué se prescribe la colonoscopia?

Por lo general, una colonoscopia sirve para detectar una gran variedad de afecciones intestinales y se prescribe habitualmente para la detección de todo tipo de dolencias.

Principales usos de la colonoscopia

  • Analizar un caso de diarrea crónica.
  • Cribado de cáncer intestinal.
  • Certificación de anemias debidas al sangrado de colon.
  • Detección de enfermedad de Crohn y localización de la afección.
  • Diagnóstico de colon irritable y otras enfermedades intestinales.

Como podemos comprobar, la colonoscopia tiene un poder diagnóstico considerablemente elevado. La observación directa del tubo digestivo, además, se complementa con la posibilidad de realizar una intervención si resultara necesario tras la exploración.

La colonoscopia requiere una dieta de preparación

Para la correcta observación del intestino es necesario que el paciente tenga el tubo digestivo vacío, lo que se realiza por medio de una dieta específica. De este modo, las heces no entorpecerán la prueba y se podrá realizar apropiadamente. Esta preparación sólo se evita en caso de urgencia, aunque el resultado del examen se verá afectado.

La dieta de preparación para la colonoscopia tiene una duración de tres días e incluye una serie de alimentos que producen pocos residuos tras su digestión. De este modo, liberaremos el intestino grueso de gran parte de las heces.

Principales alimentos recomendados

  • Arroz y pasta no integrales.
  • Pescados y carnes blancas hervidos o a la plancha.
  • Quesos granulados.
  • Galletas sin fibra.
  • Pan tostado.
  • Huevos cocidos o a la plancha.

En cuanto a las bebidas, también es importante su control, puesto que la reabsorción de líquidos se realiza principalmente en el intestino grueso:

  • Zumos de fruta filtrado.
  • Café e infusiones.
  • Bebidas no carbonatadas.
  • Caldos filtrados.

Alimentos prohibidos

Por el contrario, los alimentos ricos en grasas y fibra, que tienen una absorción de nutrientes más reducida y, por ello, una mayor cantidad de residuos, quedan terminantemente prohibidos.

  • Alimentos fritos o ricos en grasa (carne roja y pescado azul).
  • Pasta y arroz integrales.
  • Verduras y fruta.
  • Bebidas carbonatadas.
  • Leche.
  • Guisos de todo tipo.
  • Productos de bollería.

El día inmediatamente anterior a la prueba se eliminará la consumición de alimentos sólidos y se realizará una dieta basada en líquidos con caldos filtrados, infusiones y zumos sin pulpa. Cuatro horas antes de la prueba se detendrá la consumición de líquidos, incluida el agua.

Una vez finalizada la colonoscopia se recupera la dieta normal con la excepción de la consumición (que siempre es desaconsejada) de bebidas alcohólicas, puesto que pueden hacer daño a las mucosas intestinales al encontrarse el tubo digestivo completamente vacío.

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