Es típico en enero plantearnos propósitos para el año y muchos de ellos están relacionados con nuestra salud: perder peso, ponerse en forma, dejar de fumar… Curiosa yo por el tema, encontré un estudio americano muy interesante de la Universidad de Scranton publicado en el Journal of Clinical Psychology.
Dice el estudio que el 45% de los americanos se plantean propósitos de año nuevo. Perder peso está en primera posición, ponerse en forma en la quinta y dejar de fumar en la séptima. Lo que más me ha sorprendido es que dicen los datos que sólo un 8% de la gente consiguen hacer realidad su propósito.
¿Porqué no se cumplen los propósitos de año nuevo y que puedes hacer para hacerlos realidad? Me centraré en la segunda pregunta qué es más útil y práctica.
¿Qué puedes hacer para cumplir con tus propósitos de año nuevo?
Paso 1: Céntrate
Si te propones varios propósitos y de áreas distintas, es muy fácil que te sientas abrumado y eso te paralice. Mejor, céntrate en un sólo propósito. Escoge el que te resuene más, el que tenga un mayor impacto en tu vida cuando lo consigas, el que te sientas optimista de poder cumplir (conseguirlo te dará confianza para poder con otros propósitos más retadores…).
Paso 2: Clarifica
Dedica un rato a pensar realmente qué es lo que quieres conseguir y plantéatelo cómo un objetivo muy detallado. Por ejemplo, no es lo mismo decir «quiero perder peso» que «voy a perder 5 Kg antes de abril» o «quiero ponerme en forma» que «iré al gimnasio 4 veces a la semana».
Piensa también en tus motivaciones. ¿Porqué es importante para ti conseguirlo? ¿Cómo será tu vida de diferente cuando lo consigas? Asegúrate de que tu propósito es algo que realmente quieres hacer y no algo que «deberías» hacer.
Paso 3: Creételo
Cree en ti. Tú eres capaz de hacerlo. Trátate bien a ti mismo y háblate cómo lo harías con un buen amigo. Si algún día «fallas», tómatelo cómo algo de lo que aprender y trátate con compasión.
Y no te olvides de celebrar siempre tus progresos. Ten en cuenta que la mente es muy poderosa, así que úsala a tu favor. Cómo dice Henry Ford, «tanto si piensas que puedes, como si piensas que no puedes, estas en lo cierto».
Paso 4: Hazte un plan
Planifica los pasos que tienes que hacer para conseguir tu objetivo. Que sean detallados, específicos, medibles. Que estén basados en una acción. Por ejemplo “Comeré 3 frutas cada día, en el desayuno, a media mañana y a media tarde”.
Paso 5: Sigue tu plan
Y no me refiero sólo a que hagas lo que te has propuesto, sino que tengas un método para valorar tus avances. Pon tu objetivo y tu plan por escrito y dedica un rato cada semana a evaluar tus progresos, reformular tu plan si es necesario, anotar tus experiencias, pensamientos…
Paso 6: Busca apoyo
Hacerlo sólo puede ser más lento y ¡no tan divertido! Busca un amigo, compañero, familiar con el que compartir tus objetivos. También puedes contratar a un coach, a un entrenador personal, dietista… Si tu propósito es perder peso, te puede interesar mi programa Peso sano, vida sana.
Paso 7: Disfruta del proceso
No te focalices sólo en el resultado final. Disfruta del proceso. Valora y celebra tus pequeños logros. ¡Prémiate! ¿Qué tal un masaje por las 12 primeras veces que vas al gimnasio?
En definitiva, puedes conseguir tus propósitos si están bien planteados. ¿Me cuentas cuáles son los tuyos?
Imagen Mujer llegando a la meta 2015 de Shutterstock
Natalia un post muy atractivo.
Estoy muy de acuerdo en comenzar con propósitos pequeños para conseguir algo grande. Yo mismo comencé corriendo 5 minutos ( de reloj, me daba pena cuando volvía a casa, que paquete soy, me decía). Quería participar en maratones y lo primero que me marqué como reto fue una carrera de 10 km. Ahora puedo decir que si se quiere, se puede. Yo lo conseguí y no soy excepcional.
Pero la motivación es muy muy importante. Se podría pensar en un Para Qué quieres hacerlo y hallar respuesta para ser capaz de hacerlo y conseguirlo.
Gracias por el post.
Muchas gracias por compartir Fernando!!! Y felicidades por el buen trabajo y tus logros . Coincido contigo que el para que es muy importante, te ayuda a focalizarte y centrarte.
Un abrazo
¡Muchas gracias Laura! Realmente lo de no creerse capaz es un gran qué. Muchas veces tenemos una creencia muy interiorizada de que no somos capaces de conseguirlo, y nuestro subconsciente busca confirmar esta creencia y seguir en nuestra zona de confort. Es básico tomar consciencia de estas creencias y replanteárnoslas 🙂
Muy interesante, estos pasos básicos son un buen esquema de los que hay que hacer. Pienso que muchas veces falta la motivación para llevarlo a cabo o el creerse capaz como bien dices.