En este artículo encontrarás información sobre catarro y gripe: diferencias entre ambas y medidas para prevenirlas, tanto basadas en la higiene personal como en la alimentación (qué alimentos conviene consumir para prevenir y cuáles evitar o reducir la ingesta).
Catarro y gripe son inflamaciones agudas bacterianas o víricas de las vías respiratorias superiores acompañadas algunas veces de bronquitis agudas.
Los síntomas más comunes son cefaleas, congestión nasal, dolor de garganta, fiebre y tos seca. En la gripe hay una mayor afectación del estado general con dolor de cabeza y osteomuscular.
En el momento actual España atraviesa por una desoladora epidemia de gripe A que está causando 540 casos graves en las comunidades y 2 defunciones por el virus A. Se ha observado que el virus tipo A causa hospitalizaciones y la mortalidad es la esperada, casi la mitad de los fallecidos el 48% eran mayores de 64 años.
El 71% de los susceptibles de haber sido vacunados no se había vacunado. De los casos graves, el 52% son hombres y adultos jóvenes. El 77% de los pacientes presentaba factores de riesgo de complicaciones como la enfermedad pulmonar crónica, la cardiovascular y las inmunodeficiencias.
Principales diferencias entre catarro y gripe
Síntoma | Gripe | Catarro |
Inicio | Paulatino | Súbito |
Fiebre | Alta o muy alta | A veces febrícula |
Dolores musculares | Sí, muy molestos, artículares y frecuentes | No |
Dolor de espalda | Sí | No |
Dolor de oídos | A veces | Frecuente |
Dolor de garganta | A veces | Frecuente |
Secreción nasal | A veces | Sí, al principio acuosa y después más espesa |
Medidas preventivas para el catarro y la gripe
La vacuna está especialmente indicada para población de riesgo de contraer catarro y gripe, la que tiene un sistema inmunitario más débil entre los que se encuentran las mujeres embarazadas, niños entre 6 meses y cinco años de edad, personas con enfermedades crónicas (cardiópatas, bronquíticos y diabéticos), personal sanitario y mayores de 50 años.
Ventilar las habitaciones y las salas más llenas. Evitar corrientes de aire para no dispersar y transportar microorganismos.
Higiene personal
- Cubrirse adecuadamente la boca y la nariz cuando se tose o estornuda.
- Lavarse y desinfectarse adecuadamente las manos.
- Cambiarse la ropa personal y las sábanas más a menudo.
- Lavar con agua muy caliente los utensilios de cocina: cubiertos, platos, etc. También es importante limpiar con agua caliente y lejía las superficies de las cocinas (mesas, encimeras) y los baños.
- Limpiar bien los alimentos frescos (frutas y verduras). Cocinar con calor intenso para destruir los gérmenes.
Medidas preventivas basadas en la alimentación
Aumentar el consumo de estos alimentos
- Alimentos ricos en vitaminas C y A, selenio y cinc.
- Verduras: ajo que es antibiótico y estimulante de las defensas y contiene selenio con lo cual combate los virus y previene otras infecciones respiratorias. Otras verduras son apio, espinacas, acelgas, brócoli, coles, zanahorias, tomates, calabazas, puerros y espárragos por su riqueza en vitaminas C y A. Son aconsejables los caldos de verduras.
- Frutas ricas en vitamina C como las naranjas, mandarinas, kiwi, pomelo, piña, fresas, frambuesas, arándanos y zarzamoras. Cuatro naranjas proporcionan ácidos orgánicos y flavonoides que potencian la acción de la vitamina C. Se aconsejan los zumos de naranja y limón.
- El germen de trigo por ser rico en selenio y zinc.
- Frutos secos: nueces, avellanas almendras y nueces de Brasil ricas en selenio y zinc.
- Propóleo, por ser una sustancia natural fabricada por las abejas que tiene acción inmunoestimulante.
Reducir el consumo de estos alimentos
- Sal porque su exceso favorece la retención de líquidos en el organismo y provoca dolores de cabeza.
- Azúcares: reducen la respuesta del organismo ante las infecciones. El consumo abundante de caramelos, dulces, chocolates, pasteles y otros productos refinados favorecen que se desencadenen infecciones.
- Lácteos, que favorecen la producción de mucosidad en las vías respiratorias (nariz, garganta, bronquios, senos nasales y oído medio).
Una vez contraída la enfermedad no es aconsejable medicarse con antibióticos sino seguir un tratamiento sintomático para paliar la fiebre, los dolores de cabeza, garganta y articulares con paracetamol o ibuprofeno pero siempre bajo prescripción médica.
Es conveniente acudir al médico de cabecera para explorarse y de esta forma comprobar si se trata de catarro y gripe normales o si tiene tendencia a complicarse con bronquitis o neumonías. También es muy importante reposar y seguir un plan de alimentación adecuado a la enfermedad.
Imagen de Shutterstock Mujer sonándose la nariz
Muy buenos consejos! tomamos nota y más con lo fuerte que viene la gripe este año.
Espero que estas recomendaciones nos ayuden a superar el peligro de contraer la gripe A tan virulenta que nos amenaza.